En ese momento mi mundo se vino abajo, tengo que reconocerlo, pero solo tardé un minuto en replantearme un mundo distinto, en plantearme la vida contigo, y en ningún momento pensé en negarme a que vinieras, al contrario, desde ese primer minuto estaba deseando verte.
Las cosas cambiaron mucho en mi vida, en ese momento cambié de hábitos, de pensamientos, dejé mi independencia a un lado y la cambié por una dependencia mutua entre las dos.
Lo único que quería era verte, tocarte, abrazarte... pero me conformaba con sentirte ahí, como te movías como a tu manera me estabas diciendo que estabas aquí, conmigo.
Llegó el gran día y todo se nos complicó, nuestro primer encuentro no fue como yo llevaba esperando meses.

Cuando te vi, esa carita, esas
manitas tan pequeñas.. te cogí y agarraste mi dedo, con tanta dulzura, dejaste de llorar... y entendí que mi vida había cambiado..
Una vida llena de sorpresas, de aventuras..
Ahora ya han pasado varios meses, y ya disfruto de tus "mama" de tus primeros pasos... de cada logro tuyo..
Prometo estar toda mi vida
contigo. No tendré respuesta a todas tus preguntas, ni tendré solución a todos tus problemas pero estaré siempre contigo para ayudarte a conseguirlas. Celebraré tus logros como si fueran míos porque eres parte de mi , y te apoyaré cuando todos los dedos te critique, no te juzgaré solo daré consejos y te apoyaré en tus decisiones..
Zoe, viniste a cambiar mi vida, pero ni por todo el oro del globo querría cambiar lo que tengo ahora..
Eres mi sonrisa mas estúpida